La vida en blaugrana.

Elegir equipo de fútbol debería ser una de esas decisiones complejas en la vida de todos nosotros, así como elegimos carrera, novia o usuario de twitter. Y es que en los clubes como en todo organismo y/u organización hay una historia detrás, una forma de hacer las cosas, un desarrollo complejo, una filosofía, una historia que define a tal entidad.

Cuando era un niño viví rodeado de toda la parafernalia del fut-bol (así se dice aquí) azteca, tuve mi equipo favorito hasta que empecé a crecer y por ahí de la secundaria ya no me interesaba más. Años más tarde y para ser honesto (no recuerdo cuándo empezó mi afición por el FC Barcelona), pero me tocó sufrir viendo como el Madrid brillaba cual gigante ganando su novena Copa de Europa contra la única que tenía en aquel entonces el Barca hasta que llegó el mágico 2006 y con él la segunda orejona, a esa felicidad le siguieron un par de años horribles sin liga, ni champions, ni nada. Fin de un ciclo.

Viva la vida
Guardiola llegó y desempolvó a un genio como Xavi, le dio la confianza a otro como Iniesta y renovó la posición del mejor del mundo: Messi, se apoyó en el todo corazón capitán Puyol, sólo una nueva idea que cambió todo, trabajó con los mismos y obtuvo un resultado ejemplar ¿tan difícil es entender eso? (no sólo en el fútbol se debería tomar de ejemplo). Basta sólo basta una pizca de talento para acomodar todo en su lugar, eso es lo que es el Barcelona hoy en día.
Un verdadero equipo con los mejores del mundo, un fútbol sublime y cuando Puyol le cedió el gaffette de capitán a Abidal para que levantara la copa se demostró ante todo el mundo lo que es la verdadera esencia del blaugrana, el lado humano del club.
FCB es un equipo hecho y derecho, que costó años, que no tuvo éxito de la noche a la mañana, que si es ganador es porque nunca olvidó su origen y nunca traicionó su historia.

Podría terminarse el mundo mañana mismo y yo estaría feliz con el equipo de Pep Guardiola que me ha dado tres años maravillosos. ¡Visca el Barça!

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